Presentación de la problemática

1. INTRODUCCIÓN

Según la Encuesta Nacional de Discapacidad,realizada por el INEI, el 2012, el 5,2% de la población presenta algún tipo de discapacidad, siendo la limitación más frecuente en la población de discapacitados las dificultades para moverse o usar las extremidades, que alcanza a ser el 59,2% del total. El 21,5% no puede usar sus extremidades superiores para comer o agarrar tijeras y el 19,1% no las puede usar para tomar objetos pequeños. Estudios estadísticos del INEI del 2014 muestran que el mismo porcentaje se mantuvo; sin embargo, para el año 2016, el porcentaje aumentó a 5,26%. Si bien es difícil cuantificar el impacto de la discapacidad, se puede observar en la gráfica que la población con discapacidad mayormente completa su educación primaria y solo el 11,5% logra completar su educación superior. Asimismo, se observa que la población con discapacidad presenta mayores tasas de analfabetismo comparado con la población sin discapacidad.

Tabla 1 Nivel de educación alcanzada por la población de 15 años y más con y sin discapacidad, 2016. Image
Nota.INEI. la mayor cantidad de personas con discapacidad que lograron terminar algunos de los estudios son los de Primaria con 41.5% y la menor cantidad son los de superior con 11.5%.

Tabla 2 Condición de alfabetismo de la población con y sin discapacidad de 15 años y más, por sexo, 2016. Image Nota.INEI. De la población con discapacidad el 38.7% son mujeres con condición de analfabetismo.

Por otro lado, la presencia de enfermedades crónicas en la población con discapacidad es más del doble que en la población sin discapacidad, lo cual significa que el costo implicado por parte del estado es mayor.

Tabla 3 Población con y sin discapacidad que padece enfermedades o malestares crónicos, por área de residencia, 2016. Image Nota.INEI. De la población con discapacidad el 82.9% tiene una alta probabilidad de padecer enfermedades o malestares crónicos.

Asimismo, la población económicamente activa (PEA) con discapacidad es menor que la población sin discapacidad; es decir, estos deben recibir una subvención del estado. Además, las personas discapacitadas tienen un ingreso promedio mensual menor.

Tabla 4 Población con y sin discapacidad por área de residencia, según condición laboral,2016. Image
Nota.INEI. La NO PEA es mucho mayor que la PEA, por ello necesitará una subvención.

Tabla 5 Ingreso promedio mensual de la población con y sin discapacidad, por área de residencia, 2016. Image Nota.INEI. La población con discapacidad gana un 38.28% menos que la población sin discapacidad.

Hasta la actualidad, la industria protésica se ha enfocado en reemplazar la extremidad amputada para recuperar su función y para devolverle al paciente la sensación y apariencia de estar completo; sin embargo, no se ha atendido los efectos colaterales del uso de prótesis con el mismo énfasis.

2. DEFINICIÓN DE LA PROBLEMÁTICA

Alrededor del 75% de usuarios de prótesis sufre problemas cutáneos, esto a consecuencia del uso diario de un brazo prostético, el muñón se somete a condiciones mecánicas y térmicas anormales (M. Jason Highsmith, 2011) y ocurre la acumulación de sustancias de desecho en el socket, como pueden ser sudor, células muertas, polvo y suciedad que pueden provocar malos olores y la proliferación de bacterias y hongos. Esto podría conllevar a enfermedades como micosis, sarpullido por calor, ampollas, dermatitis de contacto, abrasiones y pelos encarnados dolorosos, afecciones evidenciadas en el transcurso del tiempo. (LaRaia Nicholas, 2010) (Díaz Lavana, Iván; 2010) (Protésica Colombia, 2015) La micosis es un tipo de infección común en usuarios de prótesis, producidas por distintos grupos de hongos patógenos para el hombre que invaden las estructuras queratinizadas, en los niveles superficial, subcutáneo y profundos o sistémicos de la piel (LaRaia Nicholas, 2010), ya que el contacto entre el muñón y el socket genera un ambiente oscuro, húmedo y cálido, apto para la proliferación de hongos.

- EL CASO QUE SE TRATARÁ EN ESTE PROYECTO ES EL SIGUIENTE:

Una mujer de 54años de edad quien sufrió un accidente de tránsito hace 4 años, por lo cual se le realizó una amputación transradial en el miembro superior derecho,luego de lo cual acudió a un médico fisiatra para empezar un tratamiento de rehabilitación donde se realizaron procedimientos de la especialidad y empezar con las metas pre protésicas y posteriormente protésicas acorde a la edad y a las características clínicas depaciente. Hace 10 meses el socket cumplía con sus funciones, pero debido a un cuadro de depresión la paciente dejó de usar la prótesis y empezó a perder peso fruto del desacondicionamiento físico, situación que condicionó una atrofia de la masa muscular en el muñón, imposibilitando el uso de la prótesis.